TEHUACÁN, PUEBLA. Lo que muchos temían, ocurrió. Miguel Ángel Celis Romero, alias “El Ratón Miguel”, huyó cobardemente junto a su esposa la madrugada de este lunes, después de haber sido citado a declarar por el delito de extorsión agravada contra la familia de su hermano fallecido, Alfonso Celis Romero y no acudir a la cita.
Miguel Celis Romero, está hoy señalado por amenazar y chantajear a su propia sangre para quedarse con lo que no le pertenece. Pero en lugar de dar la cara y enfrentar las consecuencias, hizo lo que mejor sabe hacer: huir.
Esta conducta no sorprende a quienes lo conocen. Miguel Ángel es una persona marcada por la codicia. Nunca se preocupó por atender ni apoyar a la familia de su hermano finado; desde un principio intentó intimidarlos y despojarlos para quitarles lo más que pudo.
Se presume que no es la primera vez que escapa. Se dice que ya lo había hecho cuando causó un accidente de moto con su entonces prometida, quien perdió la audición, y a quien dejó tirada en un hospital mientras él escapaba del país.
También estuvo prófugo en ocasiones anteriores.
El mismo lunes que huyó, promovió una demanda de amparo, que se hizo pública hoy bajo el expediente 541/2025. Una jugada que parece más bien una confesión anticipada: ¿A qué le teme tanto Miguel Ángel Celis Romero?
La historia de El Ratón Miguel está lejos de terminar, pero hoy confirma lo que todos ya sabían: no es un empresario honesto y pese a todos sus intentos por proyectar una imagen respetable, lo único que ha demostrado es ser un hombre peligroso, reincidente y manipulador.
¿Por cuánto tiempo se esconderá esta vez? ¿Tendrá el valor de afrontar la justicia o ya nunca más lo volveremos a ver caminando por las calles de Tehuacán?